Inca, la joya mallorquina por descubrir
Inca se conoce como la ciudad de la piel, donde se produce y vende todo tipo de zapatos y productos de marroquinería. Pero Inca tiene mucho más que ofrecer que zapatos y bolsos. El que se adentre en esta ciudad quedará sorprendido y encantado por los tesoros de Inca.
A primera vista, el municipio con aproximadamente 30.000 habitantes es una ciudad corriente –la tercera más grande de Mallorca por detrás de Palma y Manacor. Es accesible por la autopista o cómodamente en tren, que deja a los visitantes en la estación, justo al lado de la nueva oficina de información turística. Desde allí, una amplia zona peatonal lleva a los viajeros al centro, directamente hacia la Plaza de España con sus bares y comercios, y el Convento de Santo Domingo (para horarios de trenes y autobuses: www.consorcidetransports.org).
Rutas por Inca
Inca ofrece varias rutas turísticas, adaptadas a los más diversos intereses y perfectamente combinables entre ellas. Desde la Ruta del Calzado con visita en el Museo y varias fábricas de calzado; pasando por la Ruta del Comercio a través de las zonas comerciales del centro; y la Ruta de los Cellers, los auténticos restaurantes en los edificios donde antiguamente se guardaba el vino; hasta la Ruta del Patrimonio y la Ruta Verde que lleva a los visitantes a los parques y espacios naturales más destacados. www.incaturistica.es
Mercados
Los mallorquines conocen Inca sobre todo gracias a un día muy especial del año: el Dijous Bó (Buen Jueves), que se celebra cada tercer jueves en noviembre con un mercado de dimensiones espectaculares, que se extiende por todo el centro de la ciudad y en el que se venden y exponen animales, maquinaria del campo, todo tipo de productos de la Isla y mucho más. El Dijous Bó es una multiplicación del mercado semanal cada jueves del año. Los productos mallorquines más frescos se pueden comprar durante toda la semana en el nuevo mercado cubierto, inaugurado hace exactamente un año. Aunque es más pequeño que sus homólogos más conocidos de Palma, este mercado ofrece productos de gran calidad y un ambiente de simpatía.
Inca tiene otro mercado más: el mercado de artesanía en la zona peatonal de la calle Mayor, entre el Ayuntamiento y la Plaza de la Iglesia. Cada viernes por la mañana, entre los meses de mayo a septiembre, artesanos procedentes de toda la Isla muestran sus habilidades y venden sus productos.
Arte y oficio
No artesanía, sino una sorprendente combinación entre arte y oficio se encuentra en el edificio histórico Can Monroig, anterior al siglo XV, en la calle Can Valella. La pareja de diseñadores y arquitectos Nölle y Roberto rescataron el edificio de la ruina hace casi una década, para pasarse los siguientes años restaurando esta joya arquitectónica y histórica con mucho amor, cuidando todos los detalles y recuperando métodos antiguos de construcción sostenible. Can Monroig es una emocionante mezcla entre showroom, vivienda, galería y museo, al mismo tiempo que escenario para lecturas literarias y performances de danza y punto de encuentro para gourmets, que acuden a eventos puntuales de gastronomía con conocidos chefs de Mallorca. Al mismo tiempo, Can Monroig es sede de una nueva asociación cultural, cuyo objetivo es el fomento de la arquitectura tradicional mediterránea, la principal línea de trabajo de los propietarios, quienes han renovado y construido varios edificios en Mallorca siguiendo la línea de la arquitectura tradicional y sostenible. www.canmonroig.com
Museo del Calzado
La ciudad, que durante muchos años vivía de la industria del calzado, ha instalado un museo en honor a esta actividad. El Museo del Calzado, inaugurado hace unos pocos meses, se encuentra en el antiguo cuartel de la Guardia Civil. Merece una visita ya por su interesante arquitectura, y por la maquinaría
que tradicionalmente se empleaba para fabricar zapatos y que está expuesta en el museo. En la planta baja, un amplio espacio acoge exposiciones cambiantes. www.calzadodemallorca.com
Botas de montaña hechas a mano
Algunas de las maquinas expuestas en el museo, todavía se encuentran en pleno funcionamiento en la manufactura Cabrit en la localidad vecina Lloseta. Lo que, a simple vista, parece una vivienda, acoge una de las últimas fábricas de calzado que aún producen en Mallorca y donde los zapatos se siguen haciendo a mano. Esta empresa familiar en tercera generación produce robustas botas de montaña y para profesionales, pero también ligeras náuticas y otros zapatos para llevar a diario. Éstos se venden en la tienda Sa Muntanya a la vuelta de la esquina, propiedad de la familia también y el lugar ideal para aquellos que busquen calzado de calidad y duradero. www.cabrit.com; www.samuntanya.com
También en Lloseta, se encuentra la sede de Bestard, otra fábrica de calzado de montaña, para la caza y profesionales. www.bestard.com
Dormir entre el cura y el conde
A unos pasos de la manufactura de calzado está la plaza de la Iglesia de Lloseta, en cuyo extremo superior, encajado entre la Iglesia y el Palacio de Aiamans, se encuentra el Petit Hotel & Spa Cas Comte. A parte de esta ubicación privilegiada, el hotel boutique sorprende al visitante con una muy lograda combinación entre la arquitectura antigua y el comfort moderno (cada una de las 8 habitaciones cuenta con ordenador, máquina de café etc.). En la planta baja de este hotel con encanto, los huéspedes se pueden relajar en el Spa pequeño, pero muy cuidado, y disfrutar de las delicias mallorquinas que prepara la madre del propietario para la cena. www.hotelcascomte.com
[note color=”#f5f0dc”] Para más informacion, por favor contacte con:Fomento del Turismo de Mallorca
Tel:(+34) 971 725 396 · Fax: (+34) 971 713
info@fomentmallorca.org
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